lunes, 3 de junio de 2013

Programa SF 69 - Miguel Rep - 1 de Junio de 2013


Nadie lo había imaginado así. 
por Mariana Moyano 
Editorial SF del 1 de Junio de 2013 

Nadie lo había imaginado así. Tanto abrazo, una fiesta de tamaña proporción, semejante nivel de alegría, esa cantidad de gente. Porque había clima previo. De ganas largas de encontrarse, de vernos; y de demostrar que ni el fin de ciclo lo tienen tan a la mano, ni que la fábrica de odio, por más que produzca a su máxima capacidad, tiene clientes en todas partes. Pero nadie lo había imaginado así.
Y ya sea por Agustín o por el bochornoso modo que tienen -ya casi siempre- de querer contarnos como NO sucedido eso que es innegable, la “vida real” –para seguir la sustanciosa definición del pequeñito ahora famoso- les y nos fue estampada en el medio de la jeta. A unos, para que la bilis del odio les subiera al esófago y –según se ve- no supieran que hacer con eso; a los otros para darnos cuenta de que esto que nos pasa no es un capricho: es un anhelo y una avidez de cosa común que teníamos atragantado desde hace décadas.
Nada de lo que leí sobre por qué pasó lo que pasó ese patriótico e inolvidable 25 me terminó de convencer del todo. A cada artículo, opinión, análisis, se le escapaba un costado. Y lejos de ser esto una crítica o un gesto de pedantería ante quienes hicieron el esfuerzo de intentar comprender, es una celebración de que algo del orden de lo inexplicable ha sucedido. Eso demuestra que el laboratorio de la política sigue siendo ineficaz para revelar las razones de un pueblo. Y cuando eso sucede, gana el proyecto, porque a los que lo detestan se les vuelve palo enjabonado y les chanta en el medio del rostro que para hacer afirmaciones del talante de las que eligen hay que, al menos, asomarse a eso que a Agustín le gusta llamar la “vida real”.
Las maquinitas de la inquina también le dieron duro a la pluma, pero no alumbraron nada decente. Y es obvio. Desde el resentimiento, la repugnancia, la hostilidad, la hiel no es muy posible parir un texto digno. Es que nadie se lo había imaginado así.
Nadie se lo había imaginado así. Tanto descaro, un paralelismo de tamaña proporción, semejante nivel de delirio, esa cantidad de ira. Porque había clima previo. De ganas de dar el golpe final, de la estocada y de demostrar que la Argentina tenía su fin de ciclo a la vueltita de la esquina y que la fábrica de odio producía a máxima capacidad por el tremendo nivel de demanda.
Pero, ¿que haya “ciertos paralelismos entre aquella realidad del Tercer Reich y la actualidad argentina que nos obligan a mantenernos alerta”? Porque, muchachos, huestes de Bartolomé, el “salvando las enormes distancias” no es acero lo suficientemente duro como para fabricarse escudo.
Ni 48 horas pudieron aguantar. ¿Era demasiada gente, no?, demasiado humano junto como para esperar un poco, llamarse a la reflexión y garabatear una explicación política.
No había ni chori, ni bondi, ni plan para justificar -sin causar risa- la marea humana de ese día. Así que la cólera les subía como piraña y les iba carcomiendo el almita desestabilizadora sobre la que se sostienen. Entonces, zas, a la bazuca para aniquilar al mosquito. “Nazismo”. Sin grises, sin titubeos, sin zigzagueos. Ya ni siquiera como adjetivación o sugerencia. En nombre propio. Hitler. Él en persona. Una presidenta de la actual América Latina en la misma baldosa del sujeto que por poco elimina la posibilidad de razón del planeta, el que se cargó a seis millones entre judíos, gitanos y otros que no le gustaban, el que le hizo decir a Adorno que después de Auschwitz no se puede volver a escribir poesía. Ese. Ese mismísimo… y a la par, Cristina. Nadie se lo había imaginado así.
Antes era más fácil. En España tienen un dicho popular que le descubre la hipocresía al progresismo blandito, ése que de tan flexible termina no sólo NO siendo progre sino que le regala el ismo a la derecha. “Contra Franco estábamos mejor”, dicen los republicanos ibéricos. Porque antes era más fácil. Una pátina de raciocinio bien pensante, la dosis justa de corrección política y todos a dormir sin culpa. “Porque nos opusimos, claro que sí. A ese corrupto, ostentoso, cirquero, turco chabacano, nuevo rico y desprolijo”.
A esa queja le molestaba más la Ferrari que YPF; le dolía más Zulemita de primera dama que la sospecha del asesinato del hijo; le preocupaba más Gostanián y sus billetes que los teléfonos; le inquietaba más la visita de los Rolling a Olivos que las AFJP; le alarmaba más la avispa que el indulto; le fastidiaba más las amantes que la rebaja de los aportes patronales; le enfadaba más el golf con Bush que la desaparición de los órganos reguladores; le irritaba más el baile con la odalisca que los históricos niveles de desempleo; le atormentaba más el tapado de María Julia que María Julia.
Es que nadie lo había imaginado así. Quienes lo habían votado por razones de peronismo popular e hiperinflación no sospechaban que el cuadro de honor de la década serían Bunge y Born y Alsogaray. Y quienes no lo habían votado por antiperonismo rabioso ni sospechaban que ése que venía a llenar de oficinas de la OLP la Argentina iba a ser el aliado bochornoso del sionismo más recalcitrante. Y como nadie lo había imaginado así –salvo los enormes y verdaderos resistentes- la línea se trazó sobre el ornamento, sobre el decorado, sobre lo cosmético, sobre lo accesorio: los modales, como dijo Wainfeld una vez y no me canso de robarle, los modales por sobre el modelo.
Pero un día todo se les dio vuelta. Alguien metió la mano en la mierda. Y se embarró. Y por ensuciarse, limpió. Y puso luz. Y asombró. Y fue por más. Y vamos por más. Porque vienen por todo.
Y la línea no fue difusa. Y se abrió una zanja. Y muchos saltaron. Y se amucharon. Y se amontonaron. Y comunistas de tres generaciones se abrazaron al bombo peronista. Y socialistas paladar negro no le hicieron asco al sudor de JP. Y anarquistas de pura cepa se brindaron generosos a poner el hombro en la patriada. Y artistas de encierro individual rompieron el ombliguismo y se batieron a duelo para poner mirada. Y pensadores con egos bien trabajados salieron al ruedo y le hicieron frente a la mugre para poner palabra.
Y la línea no fue difusa. Y se abrió una zanja. Y es que nadie lo había imaginado así. Y, entonces, avalados por los dueños de los moldes que le ponen letra a la derecha golpista, una especie de nuevo progresismo ultraliberal conservador jugó con munición gruesa: “pelotudo”, brama el periodista excedido de ego. “Nazis”, lanzan los dueños del papel.
Y queda. Porque falta. Porque hay que terminar de dar todo vuelta. Y hay que seguir metiendo la mano porque queda mierda. Y hay que embarrarse. Y hay que ir por más. Porque nadie lo había imaginado así. Y hay que ir por más. Porque vienen por todo.

4 comentarios:

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  2. Hola! còmo estan? es la primera vez que escucho algo de ustedes.
    Soy estudiante de arte y con nuestra profesora estamos trabajando sobre su programa, màs espesificamente hablando sobre su reportaje hacia REP.
    Tenemos que dar opiniones personales de lo hablado y realmente me parese muy interesante lo que plantea de un arte flexible y accesible para todos, por que creo que el arte se tiene que ver y todos deben acceder a el y entenderlo si se valorara un poco màs no serìa tan invisible a los ojos de los que dien no entenderlo.

    -Como el arte tambien nos entiende a nosotros-

    Como el arte nos busca y nos encuentra en los lugares menos pensados, creo que algo tan fantastico como el arte no merese estar enserrado en los museos ... tiene que ser gratuito tiene que estar en las calles e inundarnos de esa magia que esconde, como la misma noche nos abraza con su manto...

    Muy buena entrada lo del 25 de mayo realmente pienso muy paresido, siempre se ignora una parte de la historia los actos escolares y los discursos siempre son los mismos pero la historia no fue asi, hay una parte que siempre serà ignorada ... todos recordamos el 25 de mayo como un dia lluvioso lleno de paraguas... habrà algo màs detras de eso?... LA HISTORIA ES REAL paso no puede ignorarse... no hay que negarla si es nuestro pasado y ahora es nuestro presente.

    Los saludo muy Atentamente.

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